El fin de la línea es la primera exposición de este artista en Sudamérica.Curada por Karen Grimson, cuenta con 45 de sus obras prestadas por el coleccionista Craig Robins.El fin de la línea es la primera exposición de este artista en Sudamérica.Curada por Karen Grimson, cuenta con 45 de sus obras prestadas por el coleccionista Craig Robins.
¿Puede una pintura hacer pensar antes que sentir? La desafiante muestra de John Baldessari
